miércoles

JMBL o cómo traer a un soldado de la guerra

I

estando a nueve meses
puedo relatar

vi morir un soldado en la batalla
la más difícil

lo ví pelear 
levantar su bayoneta 
gritar auxilio

vi morir un soldado en la batalla
levantó polvo con su pie en la retirada
no fue derrotado
murió 
antes de conocer la derrota

nueve meses de viaje
en barco traté de regresar 
en vano traté

su gesto al caer me pesó en el hombro

las balas casi me tocaron

las sentí cuando golpearon su cuerpo.


II

vi morir un soldado en la batalla

salir con la victoria como horizonte
regresar siendo cifra

lo vi morir
sostuve su cuerpo

con ayuda de otro soldado 
lo llevamos al hospital de campo
cargamos su peso vivo creímos

el médico de campaña fue lapidario
este hombre ha muerto, me dijo
murió en la batalla
usted lo vio caer

sí, lo vi caer
como he visto caer a muchos
y luego levantarse de nuevo

pues bien
ha de entender, soldado
usted vio las balas pasando a través de su camarada
sintió en el hombro el peso de su cuerpo y lo cargó hasta aquí

sí, le dije - pero

murió en ese preciso instante, me dijo.


III

nueve meses atrás
no tuve tiempo de prometerle siquiera
regresar yo
para traerle a casa

quisiera que usted sepa
como dije
no fue derrotado
murió con su bandera en la mano
y el pañuelo con el que le envió al combate
lo he traído también

con una cajita de fósforos
y una carta 
y un anillo

lo acuné como a un hijo antes de su partida.

domingo

despedida

en tu nombre escribo:

lo encumbro en lo alto
lo dejo 
lleno de flores

mírame
¿qué hago con este mundo 
                 ahora?

qué puedo hacer
más que pelear 
escribir canciones sobre las peleas 
y no tenerle miedo a nada

lo peor para mí
ya es historia

hija

tuvo una hija

pero murió

antes de ser algo más 

que carne de su carne


si tuviera una hija

le diría dulces verdades al oído

antes de dormir

que no parezcan, ojalá

cuentos tenebrosos


le diría por ejemplo

la cacería en verdad

no tiene por qué pedir hombres

en realidad el hombre es cualquiera

es decir

la cacería, hija, es por amor

y cualquier cosa te completa

menos un otro


lunes

licencia

no quería 
ninguna más, digamos
como un brote

quería lo práctico
            lo útil

no quería letras inútiles

pero en verdad de eso se trataba la ola
aceptar el silencio
atreverse
no a los ruidos
sino al canto 
frecuencia divina dirán
los místicos los profetas
esos hombres que nos aburren tanto
pero sí
canto inexplicable
salido como brote
inútil
mágico

porque uno lo cercena, no?

el brote
lo cercena, porque no quiere mirarlo
crecer y crecer y crecer
y no parar

pero en verdad de eso se trataba la ola

del año 2000
de arena abierta hasta donde ve el ojo
entrar al mar con desafío
dejar de pisar la arena
hundirse 

ser algo minúsculo
un detalle

pero en verdad de eso se trataba la ola
permitir su golpe
nadar en él
pensar que tienes algún poder
que te permite respirar abajo

que al abrir los ojos
no te arderán
que la sal
no dolerá

que podrás ver la superficie del agua
desde la perspectiva de los peces

entonces de eso se trataba la ola
de ella misma 
siendo ola sobre ti
llevándote lejos cerca    lejos

el brote es la ola sobre tu cabeza

es dejarlo crecer
y darle tierra y casa y comida
como el animal que es.



resaca

sólo tuvo falsos amores
                 y espejismos 

la brújula rota
más que la costilla
y las intenciones
quebradas 

novelas de invierno le nublan la razón

el pequeño burgués que vive en su pecho
se siente en su cárcel
ve al ruiseñor desangrarse 

y sin decir nada
mira la traición desde la ventana



miércoles

plegaria

cuídame del mal, señor
porque me está llevando un hijo tuyo
con la marca de Caín en la frente

me creí bailarina del averno 
me protegían 
el fuego y las fieras

pero hice este ejercicio de 
querer salir
y no pude volver a entrar

vi una frágil miseria
todo desde fuera 
es burdo

me vi en el tablero 
recibiendo los dardos 
donde mismo

soy masoquista dios mío
líbrame de este mal, señor

decirte que no 
es parte
deste intercambio perverso

negarte, señor, es parte

tráenos tu reino de justicia
tu pan         tu don

cuánto tiempo es la espera que espero 
aquí abajo pedimos a gritos
y tú no miras siquiera

empiezo a pensar, señor
que si fuimos hechos
a tu imagen y semejanza
eres entonces esto

esta fractura de hueso de mono
esta manera de tomar un palillo

y un hijo tuyo, sucio
que muerde cuando te alejas
que persigue
y su memoria pincha el ojo

líbranos de todo mal, señor
líbranos de todo mal
alguna vez, que sea.

martes

110923

errando se aprende la mano de hierro
te aprieta hasta las entrañas
y han sido años

no hay llantos en los veranos
salvo los días de enero 
resaca de un ciclo entero
sílice y olvido y cartón 
hasta que llegan los días tricolores

roto y triste empieza septiembre
como la marejada de flores, y el viento
encumbra en su aire tibio los muertos

primavera de sangre, y miedo
miles de cuerpos caminando al cementerio
procesión pagana 
procesión serena
procesión cercenada
con corvos de acero 

el monte es un regimiento
y abajo de la boca, policías
alambres de púas
una frontera que arde, y se quema
enteramente se quema

quién reina aquí, preguntan
y se quema, sin los policías
mirando fijamente

no reina todavía la fiesta
se robaron a los perros
y los trajeron para morder

hay llanto sobretodo
hay perros 
hay de verdad muchos perros

el pecho: una selva militarizada
tum la cuchara tam
tum las venas tam
más pánico que adrenalina

(entonces: escribir como si fueran 
fórmulas matemáticas
la geometría de este mundo)

aparecen como ola los recortes
¿cuánto dura este ciclo?
¿dónde están, 
ahora, los ángeles 
del antiguo testamento?

hay puros puentes cortados

y es el conflicto lo que nos mantiene vivos.

Febrero del 23

Para Gabriel Castillo, el pescador de cangrejos.


Los años son una cosa rara entre nosotros. 

Hiciste notar la distancia con tu habitual sutileza. 

Nos habíamos visto, pero no habíamos hablado realmente. 

Me dijiste: dos meses. Entonces me serví vino, y hablamos. 

De un sueño negro y secreto, despiadado. 

De lo humano y lo divino; luego, mi memoria se vuelve fragmentaria. 

Pero pensaba el tiempo como una arbitrariedad, porque había algo casi intacto. 

Después de dos meses sin hablar más de cinco minutos seguidos, nos encontró la madrugada 

girando en la pista de baile, como dos viejos borrachos, riendo, en la cantina.

lunes

la ambigüedad del duelo

El duelo es ambiguo como las olas
como saludo perdido de algoritmo triste
con las pestañas llenas de escarcha

el frío es directo y golpea 
con hilos azules
con nudos 

la verdad es una cordillera infranqueable
una muralla de tierra, y años
pistas sumergidas en cajones
cartas y mapas de contrabando
notas dispersas de voz

la verdad empuja
a renunciar al trigal por la jaula
a perderse en el fundo
a romperse los pies en la viña
hasta sangrar vino

en el mismo valle
    en el mismo río.







hipnosis

salen los caballos en la noche blanca
el último canto se entrecorta

la otra 
escucha la cuerda tensarse
como un nervio detrás del cuello
como el olor del lirio blanco

la otra
como conejo de reloj perdido
se lanza a perder la guerra

recorre el borde
se incrusta en su cuerpo una daga
el sol la mira doblarse
en voz y piel

entre la espalda y el pecho
un ensamblaje en el musgo
movimiento de engranaje expuesto

el gesto se hunde en el lirio rojo
máquina abierta
el lirio entre los espinos

carne siendo carne sobre carne

viernes

31

treintaiuno los surcos
desta cara bordada con furia
un juego de doblez torpe

novelesco es el pellejo
tiene hasta pecas de penas
y treintaiún manchas 

treintaiuno los huesos rotos
y treintaiuno los pasillos
del laberinto en el cráneo
donde se pasean
a empujones
las memorias a medias
y las medias perdidas.




miércoles

marejada

suaves se mueven las luces
en superficie curva y salada

desde lejos miras
y el resto arde

se ha visto ya que el mar
también puede quemarse

es capaz esta serpiente
de todos los males 

empieza en las tripas

termina
no se sabe.



jueves

terreno seco

cuántas horas sin dormir 
llevan acumulándose 
sobre ese cuerpo 

sembró en su almohada 
tantas veces plantas que 
nunca germinaron

es un terreno nuevo 
que le parece añejo
donde algo debía crecer 
hoy está todo seco 

cuantas tardes 
se quedó mirándote 
en ese parque

parecía que sus pies estaban
adheridos
a esa banca

es un terreno nuevo 
que le parece añejo
donde algo debía crecer 
hoy está todo seco 

nada brotará aquí.

viernes

disyuntiva

la cabeza se dispone como loca a adjetivar
todas las palabras tienen apellido
el sonido es áspero y fingido
en ruido empieza a mutar

asume calco y claridad viciosa
golpe decente de certeza
bloque sonoro que aterriza
y adentro tres voces

la primera voz
de sus asuntos canta

la segunda voz
en la pared rebota

y la tercera voz es la cabeza
con sus conciertos arbitrarios

domingo

anotaciones

la ira de O'Higgins era la norma de Dios

la patria                  era redonda toda


él era el monarca 

de la ciudad letrada


entre la línea se pliega la verdad amortajada

y cada línea es cancha


los amores habitan ahí 

son urbes de paso

o tal vez puertos

con tal o cual edificio 

con tal o cual patrimonio


pero aquí

han venido de visita 

dejando el terruño inhabitable 


pero aquí

el sol está en su hora más hermosa

se cuela por la ventana de la micro 

un color dorado


una piensa que ha tomado

la aventura como apuesta

que los paseos por estas callejas 

nunca pierden su magia 


hay construcciones triangulares

y toques de grandeza


la ciudad 

un flujo

un río


caudal pedregoso 

cuántos fríos dejará


el calor hace temblar la estructura

los ríos pierden su dulzura poco a poco


todo lo que tengo:

una promesa arbitraria

un juego fuera del poder

un colapso a medianoche


sentada sobre un reloj

cubierta de vino y sal

la tinta cruza el entramado


el cerebro es una red de carreteras 

las palabras son el vehículo 


los piratas y los poetas esconden cosas


martes

amado nervio

I

ignorante de la muerte
nunca quiso interpretar  
ni recorrer los pasillos 
memoria de ladrillo y adobe 

sabrá entonces perdonar
cuando escale montes escarpados
cuando me bañe en lluvias blancas
y olvide el olor a menta 
y a tabaco de su madre

II

perdonará usted 
la mala costumbre de buscarle
en todas partes
todo el tiempo

cómo calmar esta furia

usted llenó la casa 
usted 
que tenía por costumbre
todas las respuestas


III

crié un cuervo hermoso
y en la ceguera 
lo alimenté con mi boca

pero nunca-más 
dijo el pájaro negro

y me dejó en el frío 
sin poder seguir su sombra.

invierno

tuvo un llamado de tierras lejanas
y en su espalda bailaron los tordos
que rompieron el empedrado
como si fuera un juego de plantas

miró el campo
permitió el invierno más largo
para su flor de hielo
y se terminó quebrando

le quemaba al tacto
goteaba

en los pliegues vegetales
había sólo forma:

flor de hielo para serlo
debe matar a otra

flor muerta     signo claro 
dura lo que dura

siempre debe derretirse.

miércoles

siringe

la siringe de los pájaros
traza una línea hacia el sol
hilo de bordar azulino
que amarra este canto al centro
de una esfera de aire
de una esfera que arde

y no debe observarse directo.

martes

trabajo

arrastrar los días 
como se arrastran los zapatos
a un paso cansado 
con el cuero ajeno y el propio       gastado
hay un descalce                 al sonar el taco 

contra el piso                   se mueve rápido 
no hay sentido
más que ir contra el tráfico 

dicen que el que busca
siempre encuentra 
pero aquí se borraron
los pasos de cebra

la montaña al frente 
corta el horizonte

que lleguen los vientos 
entonces

y se corra el monte.







jueves

mañana de enero: intento

cómo describirlo:

algo que se quiebra
dos, tres veces por minuto
parece que se va
y luego vuelve y luego se va

cómo describirlo:
una estaca en las horas negras

mirar desde lejos
todo a través del velo
loop revelado en su seno
repeticiones tristes

cómo describirlo sin soltar el lápiz
el resto puede fugarse
no hay campos limpios aquí

el tiempo aserrucha todo menos las cadenas
aniquila el ímpetu

cómo describirlo:
se apodera de los hombros
de las piernas          del espinazo
un viento helado rodea el cogote 
desciende involuntaria el agua

una pausa en el miocardio 
un síncope desvanecida

tantos disparos al aire
alguna vez caerían
todos juntos como hermanos 

se escinden las partes
chocan contra el muro
poco a poco se desprenden

cómo describirlo:
la historia la contó el ojo
con su exactitud malvada

cae la mano y el brazo inmóvil
aún no se han endurecido

es que no se detiene la sierra al llegar al hueso
atraviesa el verbo sin novedad alguna 
no hay más salidas que cruzar la ciénaga a pie

no importa en qué caja cabe
no importa el lugar en la fila
 
álzate como Lázaro
y camina

martes

soneto santiagueño

como una colmena o un fractal
mosaico de pequeñas vidas
la ciudad mirada desde arriba 
extiende el plano cenital

la ausencia es sustancia
y la cámara se aleja 
recorre pasillos de luz
entre las rejas de la villa

evita las grandes avenidas
la cámara se acerca
en los ojos de los niños aterriza

en la misma plaza y calle
donde murieron los peces
nacen mirlos de alas rojas.

jueves

serendipia

resuena el eco de las esferas
armonía de las siete notas 

ceniza cae sobre Antioquía

una frontera arbitraria
como todas las fronteras 
cerraba el paso

no hubo caso
el salto fue sincrónico
sintomático el desborde

el umbral es la calle 
todas sus esquinas

en el medio, sin acertijo
la roca se abrió frente a sus ojos
y dejó correr un río de magma

lunes

Huite

Entre las faldas y espaldas del cerro
El humo baila en el cahuín
hay un resguardo verde entre las gotas

El cuerpo de hombres
de mujeres que parió la tierra
que hunden su huella en la casa
que mueven sus cadenas con el viento norte
con la fuerza del animal que entrega la vida
con su sangre y aguas claras
Resuenan los cantos de guerra

La columna es la mano del hermano. 


edición de Don José Antiñir, zorro del sol.

viernes

anfibología

no mostrar sino esconder
encerrar en signo lo real
ponerlo en control
con el blanco de frontera

ser el verde del estanque
un axolotl
mirando entre el agua y la luz
esperando un águila en silencio

miércoles

submarino

Había una quietud rara esa tarde. Llevábamos ya horas de vino, o de cerveza, o de ambas. No sabíamos si el mar era hombre o mujer. Si era una madre o un padre azul. Y en esa quietud y con los ojos cruzándome el pellejo, preguntaste. Y te mentí. No ha sido algo regular, ni una práctica insistente, pero te mentí. Por vergüenza o por orgullo, ambas sendas del mismo mal, omití que recordaba coordenadas, hitos y ciclones que dieron flujo alguna vez al caudal de texto. Que recordaba incluso una palabra cifrada, metida entremedio, quizás como un goce secreto, quizás como un anzuelo, a ver si picaba. Por vergüenza, a ciencia cierta, dije con seguridad que nunca había escrito para tí. Por orgullo, escondí en el fondo del océano la verdad y la derrota, como si fuera un personaje más de esas historias de puerto: huí de mi propia letra. Te mentí, porque no quería mirar de frente tiburones, ni tampoco tener excusas que inventar sobre la arena en los zapatos. Pero cuánto ha costado sacar cada grano del fondo, como si no fueran piedrecillas sino caballos, corriendo una carrera bajo mis pies. 

ofrenda

me dí vuelta la carne
y encontré una masa de aire frío
miré mis venas, el plasma
las plaquetas todas ordenadas
los pliegues todos inexpertos

no puedo dar nada más que esto
tejido blando, y tibio
no he podido regular el tiempo

el músculo que me da vida
es también una trampa
y a duras penas respiran
los árboles rosados

gotean atrás los líquidos
todos los fluidos de animal
de cosa viva que camina
que piensa     que escribe tonteras

es la única arma que tengo

viernes

labores

en los márgenes de esta ciudad tibia
encuentra refugio 

en las labores sabias
en repartir el pan entre los niños
en entregar la palabra como arma

detrás de la mesa 
poner el cuerpo
detrás del verbo
su movimiento

en los márgenes de esta ciudad tibia
encontrar refugio
sumergirse en el mar de gente 
ahogarse de humanidad

única muerte de gloria y rosa 


salvajismo

canta la noche de los buitres
y las muchachas se enamoran
son brutas como las olas
de gesto aniñado y triste

bajan sus polleras
las olas con la pared chocan 
y las muchachas se caen
rodando por las escaleras

el salvajismo se despliega con holgura
como quien revuelve el vino y la pólvora

abrieron las puertas y las bestias
salieron de paseo
a recorrer los prados florecidos
arrasando todo con su paso torpe.

martes

arranque de cordura

bien
que el cuerpo se vaya con el agua
que todo limpie y se lleve
el diluvio que sea 
universal que sea

bien
el mundo es de agua entero
y enteramente una es agua 
y un resto de hueso y pellejo
y también masa extraña
 
que se terminen los cuervos
y el sol les seque los cuerpos
después de la guerra

en las torres celebraremos
con petardo y balacera 

miércoles

espera

seguir atentamente las instrucciones

borrarse del mapa
guardar todo ruido
ingerir el llanto 

comérselo

liquidarse hasta sentirse líquida
abortarse como creen
conservadores y fascistas:
                                              después de nacida 

seguir instrucciones
tomar la distancia 
beberla hasta no verse más 
y ser un punto en el plano

las manos no serán 
máquinas de robar imágenes
las manos 
serán ojos para la batalla


sábado

guerrilla

desta guerrilla vivo
aprendí a caminar por la Avenida
estas son mis callejas

desta guerrilla vivo
en el sonido olvidado
en la hoguera de la noche de San Juan

En ese crepitar bendito habita mi canto

 

jueves

mal-decires

Torpeza de vez primera
camino en madera al fuego
la risa en ofrenda entrego
en brasas hundo la huella
nadamos entre botellas
el duelo en la madrugada
en la mañana enlutada
mientras aclaraba el cielo
sus manos el pan me dieron
me voy luego con la helada
 
Miré asustada los cerros
seguí bajando deprisa
también bajó la neblina
yo nunca entendí su gesto
ladraron fieros los perros
casi al final del terreno
en el secreto sendero
todavía sin respuesta
con la cabeza revuelta
sangrando llevo el desvelo
 
Puñal que causó la herida
la noche de los agravios
pasar llorando calvarios 
de tanta verdad perdida
en la duda sumergida
me acosa la incertidumbre
camino en la muchedumbre 
quisiera fuera certeza 
pero la duda regresa
y la calma me interrumpe

Irrumpe como un cometa
volando en un cielo negro
a cualquiera deja ciego
aún cuando fuera honesta
no hay confirmación de vuelta
y los mares son la gente
me ahogo solo en la mente
aquí en el centro no hay agua
caminaré hasta la playa
a ver si cambia mi suerte
 
Se instala en mí la sospecha
haciendo casa en mi pecho
tormento al que le doy techo
aún estando deshecha
es que me clavó la flecha 
sin pausa ni explicación
yo esperaba contestación
y solo encontré silencio
este disimulo inmenso
más el pinchazo de un rumor
 
Mi mal-decir fue condena
cadena al cuello amarrada
mi sangre está derramada
y el espiral de la pena
en el vaso la tormenta
mirando que la tontera
de mi cuerpo se apodera
basta, me digo intranquila
porque lo que hoy encandila
luego se vuelve teorema

Problemas yo más no quiero
cultivé ya suficientes
malvadas que son las gentes
me digo en el fuero interno
y aunque parezca el infierno
insisto en el desacato
porfiada como los gatos
siguiendo una hilacha esquiva
me lleva ya en su deriva
guitarra y vino barato

Lejos escucho su canto
escapo en marea baja
para perder mala racha
para que no vea mi llanto
tanto sufro y me adelanto
porque conozco la historia
está fresca en mi memoria
entonces le tengo miedo
y sin palabras me quedo
sintiendo tan fuerte euforia

Los pensamientos de duda
ya me inundaron los días
con agua salada y fría
con el temor de la bruma
me quejaba de la lluvia
y esta sequía se alarga
me deja la boca amarga
un sorbo de yerba mate
peor fue este disparate
se siente como una llaga

Y sin pensarlo siquiera
salto de nuevo al vacío
no llego a sentir hastío
aunque fuera por su vera
si ni una señal me diera
igual seguiría al frente
yo no le temo a esta muerte
que si es por la copa rota
celebro hasta mis derrotas
victorias tendremos siempre.




requiem

detrás del espejo negro
las mitomanías públicas
el propio relato incluso
y ahí encontrar un reverso

árboles de metal
que cortan la mano del ojo

mundo sin piernas, juguete roto

muñeca de trapo cercenada
el tiempo en una mano 
                 en la otra
                  nada como esto

aún a tal velocidad
el olvido podía tocar a veces
sin embargo él
                        pedaleó más rápido





 

trópico de cáncer

Le dijo, a modo de advertencia o de amenaza, que no había límites en alta mar. Que no había una sola sombra de duda tampoco, al mirarse erguidos como las olas. En la red ya no habían peces. Había quedado sí, un olor a madera impregnado en el cuarto oscuro. Como si fuera a revelarse una fotografía de los anillos del tronco de un árbol anciano. Le dijo, a modo de advertencia o de amenaza, que era difícil librarse de esa imagen persistente. Al estilo de la plata, se adhería firmemente a la superficie de un papel fotosensible. Advirtió de los colores confusos. Amenazó con un rojo imposible.  No eran heridas las que hacía el cangrejo, dijo.  Pero estaban sus tenazas rasgando la piel, abiertas o cerradas. 

Había sido espectro, y ahora, un molusco comiéndole el pellejo, le recordaba su carne.

domingo

castigo

otro tren pasa por tu puerta
y las ventanas son otras
las vidas de las gentes     todas otras

aparece un refugio tibio
nocturno de junio     he vivido
los últimos meses bajo luz blanca 

las estelas que me alimentaron
hoy tiñen de azul mi piel
pigmento inscrito en la sangre

y tengo miedo
no quiero que sea cruel

porque de crueldad saben los hombres


sábado

la lengua de los pájaros (II)

todas las plazas se abandonaron
los pájaros no aletearon más
cayeron al piso con un ruido sordo

eso es tu pausa
un cráneo de cernícalo
en demolición

el cráneo se abre
esa es tu fuerza

la del zorzal suicida
           directo al sol o al suelo

lunes

nocturno de mayo

algún ser humano malvado
puso luces sobre las grúas
incluso de noche
hay que soportar mirarlas
y que su espesura te embriague

fue una suerte de guerra
que se libra en solitario
soldado del rigor

paulatino
el cielo pierde color
todo gris sin contraste

paulatina
la boca pierde sabor
gris plano inmaculado

se puebla el agujero
concavidad cavernaria
 
la libertad en este lapso es imposible

entre dos bloques de hielo
haber nacido es injusto

cómo encontrar los predios abiertos
cómo abrirse la piel

envoltura de la que apropiarse
como del mundo

ahí radica nuestra proeza.

 
 
 
 

Ven de la luz

Sobre Córdoba lo escuchó cantar

ella volvía sin saber
de la mentira, o de sus pasos

de su estancia santiaguina 
nuevas fotos, nuevos brazos
 
cuadrados verdes 
se multiplicaban bajo el suelo

sobre el cielo del cielo
la voz rebotando en la bocina
el calor estaba lejos
 
masas multiformes 
se multiplicaban
blancas azulinas
 
vino de la luz:
manchones de agua
y manchones de letra 
en montañas derretidas 

stalker

ver sus videos
pornografía del dolor
la caricatura del duelo
como ver mamíferos llorar
antes de entrar al matadero

en la muerte encontrar la templanza
torturarse con amor ajeno

perder el juicio un momento
antes de volver a tenerlo.



paso

caminar no es automático esta vez
no es un medio para un fin

el recorrido da el sentido

en las paredes 
los colores dispuestos
la luminaria histérica
guías espectrales

merodear como misión secreta
sortear el desafío del pasaje

el paso se hunde 
en las veredas
hay olores 
hay gentes 
hay ladridos

pasan los niños corriendo
juegan sobre las ruinas
de la guerra de piedras

se disipan las argucias y presagios
solo sendas infinitas
y la carne gris de la ciudad valle.

exiliada en un paradero a las seis de la mañana

exiliada en un paradero 
a las seis de la mañana
el florecer de la borrachera
burlándose en mis mofletes

El quiltro con la sopaipilla en la boca
y yo miro con avidez su alimento
frágil y graciosamente sincera
que me conocí en algún lugar de esta vereda con el mismo cemento me espanto

me siento aturdida por la imagen borrosa 
de un extraño en mi cama.

insistir es insensato

insistir es insensato y ella está en el borde
                                al mar quisiera lanzarse

es que hay un incendio al medio del agua

que este dolor sirva para algo, dice
más que mirar lacónica una pantalla blanca
más que saltar al vacío por deporte
 
que este dolor sirva para algo
y mis piernas corran, dice
en todas direcciones.

miércoles

hipócrita

como buen cristiano
quiso rescatarse de su maldad
quiso lavarse el pecado

tiempo de purificación   /  dijo
tiempo de lluvias constantes

ojo constante  / digo
tiempo de la mentira 
del ver a través del visillo 
            a través de la seda manchada

tiempo de purificación     / dijo
¿cómo puede purificarse  / digo
esta herida podrida?
cómo
este pedazo de carne gangrenado
este sitio eriazo fuera del mundo

montó su propio teatro de bestias
ahora actúa como pequeño dios
con iglesia sin confesionario

sábado

tabaquismo

Era como el cigarro porque hacía mal
o eso te dijeron

pagaste la falsa condena
             qué más quiere de tí

todo pusiste en bandeja de plata
como harían los idiotas e inocentes
siendo ambas

era el cristiano un demonio
o fuiste tú demonio de Cristo

como adicto buscando a Dios
te atrincheraste en una esquina de su mente
para que siempre te encuentre

miércoles

segunda persona

no hiciste preguntas
preso de la trampa 
preso de la lengua enredada

desierto del obstáculo nocturno
escritura clandestina
con la mirada en más de una esquina
y en todas a la vez

escritura infante intestina
te dió rabia estar expuesto 
desnudo frente a la calle 
rey pez sin corona
muñeco que danza con cuerdas

la rabia te hacía bailar
la jaula estaba brillante

lleno de papeles 
quimérico, hiperbólico
trataste de borrar el cuerpo
sobre tu cuerpo almidonado 
abrazado     a una paloma



visto

la ilusión del mensaje flotando
itinerancia virtual del algoritmo
esperando más que la mirada
que aquí nada toca

el ojo clavado en la nuca
los pasos persecutorios
están sobre ella con una lupa

el reloj cuenta los meses para atrás
este compás raro sigue sonando
y los ojos clavados en la nuca

tanta pantomima, tanto fracaso
la quintrala en la pantalla blanca
la intuición clavada en la costilla
y sabe: sus ojos clavados en la nuca.

martes

transcripción matutina

dejar de fumar y que la ansiedad te esté comiendo
quizás la última fibra del pantalón deshilachado
observar al carcelero desde afuera
que no haya ni jaula ni llave
sí tal vez un golpe tal vez dos
sí tal vez se vaya este muerto
como se van las aguas por la alcantarilla

miércoles

cualquiersitio

Abro registro en el mapa
que siendo mes duodécimo del año 
dos milenios veinte y uno
recibí conforme la tarjeta
para entrar al cualquiersitio
y emprendí el peregrinaje

Una nave tremenda
me lleva directo al destino
porto equipaje ligero

anoto en el mapa
que al pasar por la aduana
me medirán el mal en la frente 
con un caleidoscopio

fronteriza la tarde se alarga
en fila infinita 
casi pensada para el pan

en el cualquiersitio no se come pan

su costa tiene un mar violeta
que da impresión de saciedad
en caso de comer
pues pan no hay

En la entrada principal del cualquiersitio
hay un caballero de esmoquin
tomando tu boleto y tu tarjeta 

y no es la aduana pero parece

el señor pregunta
cómo se ve una lágrima en un microscopio:
un laberinto en miniatura entre gris y azulino

En la aduana sólo cantamos
nadie midió mi mal

Entré a cualquiersitio
con las manos dormidas
recuerda el cristal el secreto
estás aquí por una razón

las calles verticales
están flotando
las personas caminan al revés
 
pero hay personas

Busco conocidos en cualquiersitio
algo de mí quiere fiesta

pero ni fiesta ni conocidos

el mapa ante mí se despliega
en esta patria ajena
me disfrazo de visitante anónima
los jardines no saben quién soy

he visto a los árboles saludar
a las señoras que caminan en reversa
a los gatos del tránsito

los árboles no se voltean con mi paso
ni se quitan el sombrero con gracia

es una hostilidad bien subterránea

días insufribles en cualquiersitio
me he perdido dos veces en su centro
y las esquinas cambian de lugar

los ojos se me ponen negros
se me doblan las rodillas

yo me preparé para esto 
apuesto los dados          pienso
cómo no voy a poder habitar

Cualquiersitio tiene calles angostas
por las que me deslizo con holgura
una puerta se abre:
el tipo me dice, ven
y una luz roja le alumbra la nariz

bajando una escalera me introduzco 
en la zona roja de cualquiersitio
aquí cualquiera es zona de guerra
las guerras son por equipos de 5
y se tiran bombas unos a otros

me punza la cabeza
el aire acá es azul
miro al tipo      me dice, ven
lo sigo con torpeza y timidez

en cualquiersitio las mujeres bailan
todo el tiempo
y yo no bailo
me hace notar el tipo

vine a cualquiersitio 
a robarme un cristal un secreto
abro registro en el mapa
el deseo me asusta aquí 
el aire azul me confunde
el tipo quiere agarrarme

ahora yo camino en reversa

la zona roja está atrás
mis maletas han sido registradas
no tengo nada ilegal           pienso
me refugio en la casa de acogida
que tiene cualquiersitio para mí

otra mañana de plata
abro la bitácora de viaje
el sol izquierdo despierta derretido

no sé quién manda acá
no sé si son jardines 
o selvas muy cuidadas

todo es peligroso en su justa medida
avisan las abejas cuando viene un ciclón

me alimento mirando el mar
es cierto que es sabroso
hasta cambia de menú

quiero volver
yo misma me traje hasta acá
qué vine a buscar 
un secreto un cristal 
o era un broche o un sujeto

he tenido demasiada confianza
se estiran las callejas de cualquiersitio
con la pasividad de un caracol 
estás aquí por una razón

se te apretaron los nervios
acá todas bailan dijo
y yo no bailo

regreso a veces a la zona roja
cuando el clima lo permite

he peleado ya dos veces en la guerra
sin ninguna baja 
me gusta inhalar el aire azul

hay una cierta costumbre en la espera

ahí lo ví
no llevaba esmoquin
era una flor de cristal en la chaqueta
y descubrí la misión

Mírala 
no había una igual
en toda la galaxia

róbale y corre

detrás de su ojo vi el cubo de vidrio
puedo asaltarlo                       pienso

cómo me introduzco

volví al refugio 
comencé de a poco
a doblarme 

el ensayo del crimen
en la senda del mal

hacerme origami doce veces
tomar el cristal y correr
puedo hacerlo
está inmóvil

el tipo lo trae hasta mí

me pliego doce veces
entro en el ojo
recuerdo el caleidoscopio

tanto mal había 

rompo la caja
todo sangra

el cristal aparece
florece magenta y azul
el resto es una caja negra




martes

literal

nudo de letra, nido del signo
ahí donde el olvido mengua
la lengua es secreto vivo
frontera que borra la letra
el dato no es coincidencia
es ciencia del desacato
romper con furia el relato
es la promesa sin tierra

entra el cuerpo en escena
verdad vestida de trapos

saca la mano y esconde la piedra
con su gesto rasga superficies
circular y esférica se erige
como significado clandestino
como contrabando en el frío

en esta tela sin brillo se esconde un cometa

bordados en el papel
combates de adrenalina
recuerdos y sombras chinas
sumergidas bajo él
cazando respuestas
la palabra fue santa guerra
bajó de la boca a los dedos
canta en la carne y el verbo

bajo la palabra, el tejido 
la trampa del lenguaje 
el vicio adquirido
tocar con la voz
lo que no es de Dios:
convenciones subterráneas
construcciones asfixiadas
presas del movimiento
de la violencia del sentido

objetivo como el sol ilumina
anima triste del cerro espera
la arena es batalla de bestias
torpes     solas          sin salida
su erotismo fugitivo no termina
deslizan deseos bajo la puerta
avanza furioso el caudal del río
cuál será su destino

en esta tela sin brillo se esconde un cometa. 

viernes

agua estancada
podredumbre que no amaina
la sombra sale a pasear
se come las olas

haciéndose un traje de flores
para el cortejo de nubes

haciéndose pasar por primavera
es hielo seco en el ojo

la verdad siempre
se despliega en su propia lengua